21 oraciones alentadoras por la sanidad divina

En el nombre de Jesucristo, Amén. Le recomendamos que reserve un poco de tiempo en un lugar tranquilo para orar por la curación interior. Este proceso no se puede apresurar. No es obligatorio, pero puede resultar útil. Lea todo este proceso antes de comenzar.

Por lo general, la oración de sanación interior se realiza en una conversación con un consejero u otro ministro de oración que ofrece la compasión y el discernimiento de Dios bajo la dirección del Espíritu Santo. La clave para beneficiarse de este proceso es abrir su mente y corazón a Jesús para permitirle entrar en la memoria o en el lugar herido para ministrar su gracia y verdad. Muchas personas experimentan avances significativos hacia la libertad personal o la curación al conectarse profundamente con Jesús a través de este tipo de oración de curación interior. Porque aunque Dios es invisible al ojo humano, vive en cada corazón.

Devuélveme el gozo de tu salvación y sostenme con tu generoso espíritu

En su humanidad, Jesús asumió nuestra debilidad y cargó con nuestros pecados. El Espíritu Santo está presente en las luchas y gemidos de un mundo sujeto a la decadencia, dando a luz la libertad y la gloria de la nueva creación de Dios. Es con esta esperanza que llevamos a Dios nuestras oraciones y nuestra penitencia, y esperamos a Dios por la nueva vida horarios de misas en usa del reino. El presidente de la celebración de la Sagrada Comunión también preside el ministerio de Imposición de Manos y Unción de los enfermos. El presidente puede invitar a otros a participar en las oraciones y la imposición de manos, y puede delegar el ministerio de la unción a otros ministros autorizados para este ministerio bajo el Canon B 37.

Cuando se ofrece oración por aquellos que ministrarán a otros, esto debe verse como una oración por la gracia y el discernimiento del Espíritu Santo, así como una oración por la curación. Todos los que ministran a otros necesitados deben tener en cuenta el deber de confidencialidad que conlleva este privilegio. Como parte de su preparación, quienes ministran deben estar listos para reconocer dónde se pueden requerir habilidades especializadas. La quinta comprende las oraciones de protección y paz para que las utilicen con las personas necesitadas.

Oraciones de sanación

Mantenga a alguien especial en sus oraciones hoy. Señor, mírame con ojos misericordiosos. Este formulario se puede usar en las oraciones durante la visita de los enfermos, ya sea en la Sagrada Comunión santa misa con los enfermos o como parte de otra forma de oración junto a la cama. Si se administra la unción, el ministro debe estar autorizado para este ministerio como lo requiere el Canon B 37.

• Estoy seguro de que responderás a mi oración porque dijiste que la oración del justo es poderosa y eficaz.
• Señor Todopoderoso, te pido sanidad con respecto a mis emociones, finanzas y familia.
• Declaro que soy tu justicia en Jesucristo.
• Dios poderoso, me humillo ante ti pidiendo tu sanidad.
• Deja que tu sanación prevalezca en mi vida y te traiga gloria porque no hay otro sanador además de ti.

Ninguno de nosotros ha llegado todavía, pero es un objetivo digno. Para estar sanos y completos, y para que podamos notar la obra sanadora del Salvador en nuestras vidas, tanto en formas grandes como pequeñas, debemos practicar el pensar como Él lo hace. Nuestros pensamientos deben fluir al ritmo de los suyos.

Querido Dios, sé que el primer paso en toda curación espiritual es creer. Abro mi mente y mi corazón creyendo en tu infinito poder y posibilidad. Creo que la curación es una experiencia dinámica gloria oracion y alcanzable, una realidad que se puede experimentar ahora mismo. Mantengo una actitud paciente y amorosa, porque creo que tu actividad curativa está trabajando ahora en mi mente y mi cuerpo.

Expresa las oraciones de tu espíritu. Dios es omnisciente, omnisciente, omnisciente. Comparta la oración hoy y esté bien. Sea el conector del dolor a la curación.

Espero, con gozosa expectativa, la perfecta plenitud que ahora estás manifestando a través de mí. Creo en tu constante expresión de perfecto bien en mí y a través de mí. Descanso en la certeza de tu poder curativo. Sé que contigo todo es posible.

Sí, debemos volver a visitarlos para desarraigarlos, pero esos momentos deben reservarse para momentos de cautela con mentores piadosos o consejeros sabios. El resto de nuestros pensamientos deben dirigirse instintivamente a la bondad y provisión de Dios que nos rodea y en nosotros.