4 Oraciones De Liberación ¡las Mejores!

oraciones catolicas de liberacion y sanacion

Que esta purificación llegue a toda mi familia adondequiera que se encuentre; en tu Nombre Señor Jesucristo, solicito que no quede nada de gloria en mí, vanidad u orgullo. Yo siervo inútil, solo hice lo que tenía que hacer, pues tu has sido quien ha realizado esta obra en mis hermanos, por el hecho de que tuyo es el Poder y la Gloria por siempre Señor.

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¿puede Sanar Una Oración De Sanación?

Es importante tener humildad en el momento en que alguien nos quita algo que deseamos, y aunque nos frustre, debemos ser humildes, para no hacer oración a la santa muerte. Por más bien difíciles que simulen las cosas, cada día es de bendición, los dones del espíritu beato jamás acaban de sorprendernos, y en los más instantes de más aflicción, su acompañamiento nos hace libres. Cuando hacemos nuestras oraciones para finalizar el día, nos encontramos arrodillándonos antes nuestro Padre, como símbolo de agradecimiento por su misericordia. Los grupos de oración carismáticos de ciertas parroquias ofrecen tiempos de oración para pedir la sanación y liberación. Para acompañar este desarrollo, es importante recurrir a los sacramentos, singularmente al sacramento de reconciliación (o confesión), y a la eucaristía. Bastante gente piensan que si la oración de curación y liberación se da en un momento, serán sanadas y liberadas.

Cristo en el corazón y la cabeza de todos y cada uno de los hombres que piensan en mi, Cristo en la boca de todos y cada uno de los que hablan de mi, Cristo en todo ojo que me ve, Cristo en todo oído que me escucha. Me envuelvo actualmente y ato a mi una fuerza vigorosa, la invocación de la Trinidad, la fe en las Tres Personas, la confesión en la unidad de Creador del Universo.

Oración Contra Todo Mal

Perdona todas mis proyectos pecaminosas, mis acuerdos con el enemigo y por haberme creído sus patrañas. Ahora me someto a ti como mi Señor, amado Jesús. Ahora rompo todo acuerdo que haya hecho con el enemigo.

• Invoco la presencia de los ángeles, arcángeles , principados, virtudes, potestades, dominaciones, querubines, serafines y tronos de dios; a fin de que sean ellos quienes lleven a cabo esta guerra contra el mal.
• Cura las lesiones de mis recuerdos, a fin de que nada de cuanto me ha acaecido me haga permanecer en el dolor, en la angustia, en la preocupación.

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Líbranos de cualquier ambición o atadura que nos robe la paz. Líbranos del tentador, de sus seducciones y de sus engaños, no dejes que siembre la cizaña del mal en nuestras vidas. Concédeme una fuerte fe en ti y en tu palabra.

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Que los dardos incendiarios del maligno, no me toquen ni en el cuerpo, ni en el alma; que ni el veneno, ni el hechizo, ni el ocultismo me hagan daño; que ningún espíritu encarnado o descarnado me perturbe; que Satanás y sus huestes del mal, huyan de mí al notar la Coraza de Tu Sangre Protectora. Libérame de todo mal y peligro Gloriosa Sangre del Redentor, para que pueda cumplir la misión que me fué encomendada y ofrecer Gloria a Dios. Me consagro y Te consagro mi familia de manera voluntaria al Poder de Tu Sangre Protectora.

Escojo en este momento ponerme toda la armadura de Dios y te estoy pidiendo que limpies y selles mi cuerpo, mente, alma y espíritu con tu sangre, Señor Jesucristo. Por favor, haz que tus ángeles guerreros aten y alejen a todos los demonios, sus artificios y todo su poder desde en esta barrera protectora y sean mandados al abismo. Señor Jesús, me arrepiento de todos y cada uno de los errores que he cometido durante mi vida y te pido perdón. Señor pasa por toda mi vida desde el momento de mi concepción, y sáname del amor que me ha podido haber faltado ¡lléname de tu amor!

Ven, Espíritu Santurrón, penetra en las profundidades de mi alma con tu amor y tu poder. Arranca las raíces más profundas y ocultas del dolor y del pecado que están enterradas en mí. Quema con tu fuego abrasador toda tiniebla instalada en mí, que me consume y también impide ser feliz.

Te digo Señor que Tú eres un Dios bueno, alabado y glorificado seas. Señor Jesús, conoces mis debilidades y angustias en este momento, te estoy pidiendo que me llenes de tu bendición.

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